La astucia del “pequeño Nicolás”

29/10/2014 - 3 Minutos de lectura

Detrás de esa cara de niño inocente que parece no haber roto un plato se esconde una personalidad digna de estudio que ya ha llamado la atención de psicólogos y sociólogos  de medio mundo. La rocambolesca historia del conocido como “pequeño Nicolás”, aunque su verdadero nombre es Francisco Nicolás, ha ocupado portadas de periódicos nacionales pero también se ha hecho un hueco en tabloides de otros países, como The New York Times. Cómo un joven de 20 años ha podido llegar a alcanzar estas cotas de protagonismo todavía es una incógnita pero las piezas de este puzzle van dejando entrever que estamos ante un ejemplo perfecto del denominado personal branding o marca personal. Conozcamos un poco más de lo que se esconde detrás de este personaje.
Social Media Galicia, Marketing Digital Vigo, Posicionamiento Web Vigo, Alola Media VigoEste concepto, personal branding, hace referencia al hecho de considerar a una persona como una marca. Se trata de un activo inmaterial que incluye a la apariencia externa y la impresión que se causa en los demás y cómo esta se mantiene, es decir, el posicionamiento. Francisco Nicolás estaba siendo, y es, consciente de sus fortalezas, esas que debía explotar para alcanzar esas metas tan ambiciosas que se había propuesto y que hoy le han llevado a estar acusado de delitos como estafa, fraude y suplantación de personalidad. La confianza y  seguridad en sí mismo son, sin duda, los cimientos de todos los logros de este astuto jovencito. En todas las imágenes públicas hemos visto a un chico que, a pesar de su edad, se mostraba cómodo en ambientes distinguidos y serios, no aptos para un adolescente, desde luego.

Su correcta forma de expresarse y la facilidad de relacionarse con altos cargos institucionales y de grandes empresas es sorprendente pero le ha dado sus frutos, pues nadie llegó a sospechar que se trataba de un impostor. Y es que personal branding también incluye la manera en que la persona se diferencia de los demás, pues la marca personal persigue que la impresión causada sea duradera. El apartado de las debilidades ajenas no debe dejarse de lado en un análisis como este. Ya es larga la lista de personas que han confiado en las palabras y falsas promesas del “pequeño Nicolás”, algo que implica una gran labor por la parte del protagonista. Estudiar con quién iba a reunirse, qué iba a transmitirle y cómo tratarle para conseguir su complicidad era parte del trabajo previo que debía hacer Francisco Nicolás con las “víctimas” de sus engaños.

En esta historia no faltan los ingredientes para convertirla en el guión de una película pues, una vez más, la realidad ha superado a la ficción.

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